El Uso del Espacio

 Una manera de determinar el volumen de un objeto o sustancia es dividir su masa por su densidad. El volumen representa la cantidad de espacio que ocupa algo, y para que una estructura tenga espacio, debe poseer forma, tamaño, color y textura. Estos elementos son indispensables para crear un espacio viable. Por lo tanto, además de encargarse de la creatividad del proyecto, los arquitectos también deben considerar el sistema espacial.

Los espacios pueden organizarse en sistemas direccionales y patrones de secuencias. Esto implica que el espacio puede estructurarse de manera repetitiva y recurrente para optimizar el diseño y aprovechar al máximo el espacio limitado disponible. Por ejemplo, una secuencia de cuadrados encajará perfectamente uno con otro, mientras que los círculos no lo harán. En este caso, el cuadrado sería la mejor figura para maximizar el espacio.

La simetría y el equilibrio son elementos cruciales a considerar en el sistema espacial. Esto implica que al dividir un diseño por la mitad, cada lado debe mantener medidas uniformes, patrones, entre otros aspectos. Por ejemplo, una cancha de baloncesto se divide con una línea central, asegurando que ambos lados tengan la misma cantidad de figuras y las mismas medidas para garantizar condiciones justas para ambos equipos.

En resumen, el sistema espacial es fundamental para la realización de cualquier proyecto, ya sea en la vida de un arquitecto o en actividades cotidianas. Se utiliza para maximizar y comprender el espacio disponible y accesible, asignándole diferentes funciones según las necesidades específicas.